El arte es algo que no todo el mundo es capaz de comprender. Entender el arte es una tarea compleja, evidentemente existen obras de arte que todo el mundo es capaz de entender y disfrutar, pero hay otras que requieren del espectador algo más, un esfuerzo en la mirada, un conocimiento o una especial sensibilidad.

Tim Noble y Sue Webster son dos artistas británicos que han conseguido con su trabajo aunar en sus obras la complejidad y la sencillez del arte. Sus obras tienen dos lecturas, parecen esculturas contemporáneas hechas con residuos, el espectador puede en principio quedarse asombrado de que un montón de basura (por mucha escultura que sea) sea una obra de arte. Sin embargo cuando se exponen esas esculturas a un haz de luz con un determinado ángulo, aparecen en la pared otras esculturas de forma clara, nítida y concisa.

Buena muestra de su trabajo lo podemos encontrar en el libro British Rubbish de la editorial neoyorkina Skira Rizzoli, donde se muestra el trabajo que han realizado en los últimos años.

La próxima vez que en un museo de arte moderno veamos un montón de basura, no carguemos las tintas contra la estafa del arte moderno, igual hay gato encerrado.

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